La fase de teórica involucra la mente, tiene una duración de once a doce semanas. Recibirás enseñanzas poderosas de oradores motivadores y misioneros, diseñadas para provocar, desafiar y animar. Se discuten temas como escuchar la voz de Dios, identidad, pecado y perdón, entre muchos otros. El tiempo en el aula es una oportunidad para construir amistades y profundizar en las preguntas que todos tenemos.

Una parte clave del desarrollo del carácter es servir a quienes nos rodean. Una parte de la EDE consiste en colaborar para que la comunidad de JUCUM funcione, mientras se aprende sobre trabajo en equipo y dedicación. Ya sea trabajando en jardinería, limpieza, recepción u otras tareas, este aspecto de la EDE te ayuda a ser parte de la comunidad de JUCUM que te rodea.

Quizás una de las partes más importantes de la EDE son los grupos pequeños y el discipulado uno a uno. Estos momentos te permitirán procesar lo que estás aprendiendo acerca de Dios en un ambiente seguro. Las reuniones uno a uno generalmente se llevan a cabo con un miembro del personal de la EDE, alguien que te acompaña durante toda la fase de conferencias. Su objetivo es ayudarte a crecer a través del mentorazgo y el consejo.

La transformación personal conduce a la transformación de la comunidad. Tendrás la oportunidad de marcar una diferencia en la sociedad que te rodea a través del ministerio y pequeños alcances. Ya sea enseñando el evangelio, trabajando en un proyecto comunitario o orando por el pueblo o ciudad, el personal de la EDE te guiará en cada paso, equipándote para impactar un vecindario.